La vocación por asegurar la calidad de nuestros servicios es un diferencial que nos ha permitido crecer y consolidar nuestra oferta.

Desarrollamos cada proyecto bajo estándares y metodologías que adoptan las mejores prácticas de la industria y aseguran óptimos resultados para nuestros clientes.

Debido a la evolución natural de esta cualidad y a la necesidad de fortalecer nuestras ventajas competitivas, la compañía decidió formalizar esa vocación certificando sus procesos de producción de software bajo estándares de calidad reconocidos internacionalmente en la industria de las tecnologías de la información.

Asimismo, desde hace más de 5 años, TGV cuenta en su estructura formal con un área de Calidad para dar un consistente soporte a la operación de la Compañía.

 
 

 
     
 

En septiembre de 2007, TGV obtuvo la acreditación de Nivel de Madurez 2 de CMMI©. La iniciativa de mejora continua en nuestros procesos productivos abarca un plan de evolución que continuará avanzando en el nivel de madurez del modelo CMMI©, revalidando la acreditación de calidad en el 2010. CMMI© (Capability Maturity Model Integration) es un modelo de calidad desarrollado por el Software Engineering Institute (Carnegie Mellon University) para la mejora y evaluación de los procesos de desarrollo y mantenimiento de sistemas y productos de software. El Nivel 2 del modelo asegura que nuestros procesos son planeados, documentados, realizados, monitoreados y controlados a nivel de proyectos. Los requerimientos, estándares y objetivos para los procesos, sus productos de trabajo y sus servicios son definidos y documentados. El estado de los productos es visible para la administración en puntos de control preestablecidos. Los objetivos de tiempo, calidad y costo para los procesos son satisfechos.

 
   
 

TGV completó el programa Quality & Competitiveness (Q&C) con una calificación de tres estrellas, tras el informe final otorgado por la consultora QOMG / CFI Group, seleccionada por Microsoft para realizar la auditoria.

Q&C es un programa que evalúa, para cada empresa participante, su grado de madurez en la implementación de procesos sistematizados de gestión que permiten diagnosticar, evaluar y plantear mejoras en la organización de forma continua. Toma como modelo a la gestión de calidad y competitividad de organizaciones internacionales para observar con claridad el funcionamiento integral de la compañía.